Amarakaeri, el bosque que integra vida

Como Wachiperi – Harakbut valoro el territorio, el bosque que integra vida. Lugar sagrado, fuente de alimentos, nuestra farmacia. Mis antepasados me transmitieron conocimientos y saberes ancestrales, que a través de mi persona contribuyen con la conservación de estos territorios reconocidos como Área Natural Protegida. Alrededor de 400 mil hectáreas que aseguran el desarrollo sostenible de nuestras hermanas y hermanos Harakbut, Yine y Matsiguenka de las 10 comunidades socias.

Para los Harakbut, Amarakaeri es su lugar de origen, su territorio ancestral, como se cuenta y se transmite en el mito del Wanamei. En Madre de Dios y Cusco se ubica la Reserva Comunal #Amarakaeri, territorio ancestral del pueblo #Harakbut, esencial para los pueblos indígenas por ser fuente principal de alimentos, medicinas y de diversos recursos que provee. Una reserva que es administrada bajo un modelo de cogestión, en donde los pueblos indígenas, a través del ECA Amarakaeri, comparten responsabilidades con el Estado peruano representado por el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas (SERNANP).

Un modelo de gestión que se enmarca en el Régimen Especial para la Administración de Reservas Comunales y en un contrato de administración por tiempo indefinido y con roles indelegables. Los pueblos indígenas asumen su rol a partir de soluciones basadas en convivencia con la naturaleza, mediante la propuesta de acción climática de REDD+ Indígena Amazónico (RIA).

Aprendimos que es posible conservar y generar el desarrollo sostenible de las comunidades. En la Reserva Comunal Amarakaeri trabajamos bajo la filosofía de “Todos Somos Amarakaeri’; con propuestas técnicas hemos pasado de la protesta a la propuesta y de la propuesta a la acción. Enfrentamos una etapa difícil y crítica a nivel nacional e internacional, por la propagación de esta nueva enfermedad invisible conocida como el COVID-19. Desde el 16 de marzo venimos acatando las disposiciones del Gobierno peruano frente a esta pandemia, como es el aislamiento social. A pesar de ello, seguimos adelante con nuestras labores institucionales de manera remota, por lo que felicito a nuestras 10 comunidades socias, a la Junta Directiva, al equipo técnico y a toda la familia de la cogestión de Amarakaeri, así como a nuestras organizaciones Federación Nativa del Río Madre de Dios y Afluentes (FENAMAD) y Coharyima que hoy nos sentimos unido y fortalecidos.

Las comunidades nativas socias de Amarakaeri siempre se han caracterizado por su resiliencia ante distintas situaciones que han enfrentado a lo largo de la historia, tengo la plena confianza que está no será la excepción, a través del ECA Amarakaeri pido a las comunidades socias que sigan todos los protocolos de salud y tomen todas las medidas correspondientes para que nuestros pueblos no se vean afectados.

Por Walter Quertehuari