El Estado peruano anunció la suspensión indefinida de las clases presenciales con el fin de evitar la propagación del coronavirus. De este modo, señaló que se entregarán tablets a los escolares de bajos recursos para continuar con el programa virtual “Aprendo en casa”.

Sin embargo, según las declaraciones del director regional de Educación, Carlos Carrasco, Madre de Dios no recibirá dicha herramienta tecnológica, ya que la región no es considerada en situación de pobreza o extrema pobreza.

Frente a ese panorama y tomando en cuenta la realidad de las comunidades nativas del país, donde la gran mayoría carece de computadora, televisor y radio, el ECA Amarakaeri entrevistó al líder harakbut Fermín Chimatani. Durante el diálogo, el también presidente de la Asociación Nacional de Ejecutores de Contrato de Administración del Perú (ANECAP), que representa a 10 reservas comunales, manifestó su preocupación por la brecha digital que aún existe en las comunidades nativas, señalando que dicha medida es ajena al contexto de la población indígena.

“El nuevo sistema educativo no refleja la realidad de las comunidades. La tecnología y los materiales tienen que ser accesibles para las comunidades (…) Se tiene que viajar para adquirirlos. Tampoco hay internet y conexión en las comunidades”, indicó el líder indígena desde la comunidad nativa Puerto Luz, su lugar de origen.

Asimismo, el líder remarcó que el Estado peruano carece de medidas específicas dirigidas para los pueblos indígenas. En ese sentido, exhortó que se recojan las propuestas de las organizaciones indígenas para enfrentar el coronavirus en las comunidades nativas.

“Las comunidades nativas tienen su propia realidad y particularidad. Tiene que haber una estrategia específica para los pueblos de la Amazonia en temas de salud y educación. Las organizaciones indígenas juegan un papel importante para que orienten la estrategia según la realidad de las comunidades indígenas. El Estado debe tomarlas en cuenta”, resaltó.

MEDIDAS DE PUERTO LUZ

La comunidad nativa Puerto Luz tiene como ruta de acceso una carretera que la conecta con la zona minera de oro Delta 1. El temor por la actividad ilegal es latente debido a su continuidad pese al aislamiento social y la falta de resguardo policial.

Ante ello, una de las medidas de la comunidad fue restringir su ingreso para evitar la expansión del también conocido COVID-19 a través de los mineros ilegales. Así lo informó también Fermín Chimatani.

“Las acciones que se están tomando es acatar el aislamiento, no tener contacto con personas a través de la carretera de los mineros ilegales. También se están colocando puestos de control para vigilar quienes ingresan al territorio comunal (…) Los ilegales aprovechan para seguir sus actividades y esto afecta a las zonas cercanas o al mismo ingreso de las comunidades”, aseguró.

YO ME SUMO A AMARAKAERI

Fermín Chimatani saludó la iniciativa del ECA Amarakaeri al lanzar la campaña “Yo me sumo a Amarakaeri”, indicando que “es importante los esfuerzos que se están haciendo desde las organizaciones indígenas que tienen el rol fundamental de administrar las reservas comunales junto al Sernanp. Desde ANECAP invitamos y llamamos a la reflexión para que apoyen iniciativas de todos y la del ECA Amarakaeri, que trasladan la voz de las comunidades para que sus demandas puedan ser atendidas. Debemos sumar y trabajar en conjunto”.